La experiencia real y directa del auditor PRL en empresa: Un aspecto básico
Autor:
Javier Cassini Gómez de Cádiz,
Auditor Jefe y Director en Prevycontrol, Auditora de SGPRL
Si se realiza una Auditoría Legal en materia de prevención de riesgos laborales, su objetivo debe ser aportar valor a la empresa auditada, además de cumplir de modo adecuado con el Art.30 del RD 39/97
Igualmente, es necesario pensar en que se puede lograr mayor seguridad jurídica si debemos usar en algún sentido un Informe de Auditoría Legal en prevención de riesgos laborales, pensemos en la aportación del Informe como medio de prueba o la defensa del mismo en acto de juicio, por ejemplo.
Por tanto, hay factores que se deben tener en cuenta a la hora de empezar el proceso de Auditoría. Y uno de ellos es la experiencia y visión que tiene al auditor en el mundo de la empresa. Resultará de capital importancia para aportar valor, cumplir adecuadamente con la normativa y aportar, en su caso, mayor seguridad jurídica. Profundicemos.
Tal y como define el Art.30 del RD 39/97, modificado en este sentido por el RD 604/2006, el concepto y objetivos de la auditoría del sistema de gestión de prevención de riesgos laborales son los siguientes:
a) Comprobar cómo se ha realizado la evaluación inicial y periódica de los riesgos, analizar sus resultados y verificarlos, en caso de duda.
b) Comprobar que el tipo y planificación de las actividades preventivas se ajusta a lo dispuesto en la normativa general, así como a la normativa sobre riesgos específicos que sea de aplicación, teniendo en cuenta los resultados de la evaluación.
c) Analizar la adecuación entre los procedimientos y medios requeridos para realizar las actividades preventivas mencionadas en el párrafo anterior y los recursos de que dispone el empresario, propios o concertados, teniendo en cuenta, además, el modo en que están organizados o coordinados, en su caso.
d) En función de todo lo anterior, valorar la integración de la prevención en el sistema general de gestión de la empresa, tanto en el conjunto de sus actividades como en todos los niveles jerárquicos de ésta, mediante la implantación y aplicación del Plan de Prevención de riesgos laborales, y valorar la eficacia del sistema de prevención para prevenir, identificar, evaluar, corregir y controlar los riesgos laborales en todas las fases de actividad de la empresa.
Si nos centramos en el apartado d), volveremos a ver la aparición del concepto de la integración de la actividad preventiva, que aparece de manera profusa en la legislación.
Por tanto, si la función del auditor es valorar el estado de definición y funcionamiento de un Sistema de Gestión en Prevención de Riesgos Laborales, se deberá de comprobar por el mismo la integración de la PRL en la actividad de la empresa y que no se convierta o haya convertido, la PRL, en una actividad aparte o staff dentro de los sistemas de funcionamiento de la empresa.
Llegados a este punto resulta claro que, para poder valorar adecuadamente el nivel de integración de la PRL y entender cómo funciona la empresa en general, se deben conocer con cierta profundidad los cometidos de cada Departamento de las empresas como concepto global, sus interrelaciones generales, las vinculaciones que normalmente suelen tener con la actividad preventiva, etc. Y esto resulta complicado, o imposible, si no se tiene muy interiorizado cómo suelen funcionar las empresas de modo más o menos normal.
Además, es con este conocimiento general y con el de la aplicación concreta de la actividad preventiva con lo que se pueden detectar posibles aspectos de gestión a mejorar, a la postre lo que pensamos que toda persona vinculada a la aplicación de la PRL debe aportar. Así, en ocasiones, se logran proponer soluciones con actividades que ya están siendo realizadas en la empresa por otro Departamento o introducir un pequeño cambio de gestión en algún otro Departamento que asegure el cumplimiento de un requisito legal y mejore la gestión preventiva; además, con ello estaremos integrando la actividad preventiva en la gestión diaria y normal de la empresa…como debe ser.
Por tanto, no se me ocurre mejor garantía de conocimiento de cómo funciona una empresa -en general-, de cuáles son los cometidos de los distintos Departamentos y sus relaciones, que haber desempeñado puestos directivos que hayan permitido enfrentarse a los problemas derivados de la gestión general de una empresa pues no parece definitivo la coincidencia de sectores de actividad pues hablamos de gestión, no de conocimientos concretos de sector.
Igualmente, los conocimientos en Recursos Humanos se configuran también como primordiales para entender el funcionamiento de la gestión de prevención de riesgos laborales en la empresa.
La actividad de Recursos Humanos en las empresas es transversal y se encuentra relacionada con todas las áreas en las que existan personas, o sea, todas. Si le unimos a esto que la Ley de Prevención de Riesgos Laborales es una legislación orientada básicamente a la protección de los trabajadores, entenderemos la estrecha relación que suele existir entre los Departamentos de Recursos Humanos y de Prevención de Riesgos Laborales, llegando en ocasiones la actividad de Prevención de Riesgos Laborales a encontrarse integrada de manera dependiente del área de Recursos Humanos.
El Auditor de Sistemas de Gestión en PRL debe interrelacionar, si quiere realizar un trabajo adecuado y útil para la empresa auditada, con personas a todo nivel jerárquico y de muy distintos departamentos, además de con los implicados directamente en la aplicación de la PRL en la empresa, ya sean técnicos de prevención, delegados de prevención, miembros de Comités de Seguridad y Salud, etc.
Por lo anterior -y teniendo en cuenta que la Prevención de Riesgos Laborales se encuentra muy relacionada con aspectos como el Clima Laboral, la Motivación, la Organización de Recursos Humanos (horarios, funcionalidades, cargas de trabajo…), etc- el Auditor debe ser capaz de detectar si, debajo de la situación de gestión preventiva que haya encontrado, existen causas organizativas o vinculadas a déficits en gestión de Recursos Humanos globales o departamentales.
La importancia de disponer de conocimientos prácticos en Recursos Humanos por parte del Auditor en Sistema de Gestión PRL se acentúa al abordar y deber valorar aspectos como los Riesgos Psicosociales y su gestión pues, como todos podemos entender, la relación entre la actividad de Recursos Humanos y la citada área preventiva es tan estrecha que, en ocasiones, llegan a confundirse conceptos de Clima Laboral y Riesgo Psicosocial, por ejemplo.
En resumen, si las personas son el activo primordial de una empresa y la actividad de Recursos Humanos se encuentra estrechamente vinculada en muchos sentidos a la Prevención de Riesgos Laborales, el Auditor en Sistemas de Gestión PRL debe disponer de conocimientos de aplicación de Recursos Humanos para valorar causas de determinados déficits en PRL, así como lograr entender adecuadamente los distintos tipos humanos que hay en cada directivo o mando intermedio y que influyen en la gestión de prevención de riesgos laborales, además de por la coincidente transversalidad de los Recursos Humanos y de la Prevención de Riesgos Laborales.
Para entender la necesidad de experiencia real en empresa de que debe disponer un Auditor y, de este modo, cumplir adecuadamente con lo expuesto en el citado Art.30 del RD 39/97, podemos relatar brevemente un caso real.
Recientemente, participamos en la Auditoría Legal PRL de un importante grupo industrial. La situación era muy compleja, incorporaciones recientes en el Dpto.PRL, cambios muy sustanciales en el proceso productivo, las empresas integradas en el grupo interactuando entre sí diariamente, etc.
Tal era la complejidad de la Auditoría que hubo hasta que rediseñar el equipo auditor, designado inicialmente, si queríamos aportar valor a este grupo industrial realizando un trabajo de utilidad.
La experiencia empresarial de los integrantes del equipo auditor resultó básica para poder valorar la integración en PRL, opinar sobre grados de implantación o vislumbrar el camino futuro de gestión preventiva en la empresa, conocer el negocio de la organización…en el cual la PRL debe estar integrada. Además, el tiempo de que se disponía, como en todoa Auditoría Legal PRL, era limitado y, por ello, la capacidad del auditor para desgranar información y su entendimiento resultaba muy importante. Por todo lo anterior, resulta evidente que la experiencia del auditor adquiere una importancia de primera magnitud, especialmente si el objetivo es aportar valor en PRL a la empresa auditada.
Concretamente, la experiencia real en directa en puestos directivos y el conocimiento real en Recursos Humanos se configuran como elementos primordiales para que el proceso auditor vaya más allá de una interpretación y comparativa de lo realizado por la empresa en PRL con la normativa vigente pues, entendemos, esa simple perspectiva no aportará mucho a la empresa ni pondrá en valor al proceso de Auditoría Legal en PRL. Por lo anterior, deben ser características básicas para el diseño del proceso de auditoría, como lo fueron en el caso con el que iniciamos estas líneas.
Por poner un ejemplo, en otro grupo de empresas en un sector de alta peligrosidad con centros diversos, al diseñar el proceso de auditoría, se consideró necesaria la participación de cuatro auditores: Un Auditor Jefe con larga experiencia en gestión PRL y directiva, un auditor con experiencia en el sector específico de la empresa auditada, un auditor experto en seguridad industrial y un auditor médico especialista en Medicina del Trabajo con conocimiento del sector de actividad concreto. El resultado fue la aportación de valor y el comentario de la empresa: ¿Cómo es posible que en tres días hayáis captado con tal exactitud lo que somos y hacemos?